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dilluns, 29 de juliol del 2013

Ley wert, seguimos avanzando hacia atrás



Corren tiempos difíciles para el pensamiento humano. Para la libertad de elección, para la capacidad de razonar. El pensamiento crítico se diluye en una sociedad liquida que lo impregna todo de inmediatez y de facilidades comerciales.
Intentando comprender el pensamiento, observo que todas mis reflexiones, y en consecuencia mis acciones, vienen determinadas por unos elementos delimitados. Cada idea que pienso es producto de mis experiencias, mis lecturas, mis conocimientos, de mi entorno, en definitiva de todo lo que compone mi identidad. A este concepto, ahora se le llama bio-psico-social. Todo lo que compone mi ser (a nivel biológico, psicológico y social) tiene influencia sobre mis actos, mis pensamientos y mi persona. Y esta identidad es personal e intransferible, es única. Cada uno de nosotros tiene una y es diferente a las demás. Me gusta pensar que cada ser humano es un gran enigma y un ser especial. Que cada uno de nosotros tenemos particularidades que nos diferencian y a la misma vez nos determinan. Así todas nuestras conductas y pensamientos serán determinadas según nuestras experiencias vitales, tanto físicas, como biológicas, psíquicas o sociales.
Con todo esto entiendo que cada ser humano puede elaborar una opinión distinta sobre una temática en concreto. Ahora bien, analizando el funcionamiento de nuestra democracia observo que en demasiados casos es difícil hacer prevaler esta opinión personal y podríamos llegar a pensar en algo paradójico. Viendo la gran cantidad de diputados que llenan el parlamento o el senado, según la explicación anterior, alcanzaríamos la idea de que cada uno de ellos puede elaborar su propio pensamiento, según su trayectoria vital. Pues seguramente lo hacen en sus casas, pero en donde se deciden y se discuten las leyes que afectan a toda la población es evidente que no. Todos los miembros de un partido se ven obligados a votar lo que el partido haya decidido, independientemente de lo que piense cada uno. En caso contrario son castigados con una multa económica y en una cuestión extrema pueden llegar a ser expulsados del partido.  

Quería reflejar la evidencia de la magnífica ley que nos ha impuesto nuestro gran amigo de la pedagogía Jose Ignacio Wert. Una ley en que todos sus colegas de partido han votado a favor. Pero pondría la mano en el fuego en que a más de uno, se le paso por la mente la aberración humana y pedagógica en la que estaban participando. Alguien con un minúsculo criterio educativo y con una vaga idea de lo que es la educación, en ese momento se le pasaría por la mente la gran injusticita que significa esta ley. Una ley que etiquetará a todos los “malos estudiantes” determinándolos a un fracaso absoluto. Una ley que discrimina y niega cualquier acto educativo posible. Una ley que no deja espacio a las partes más vitales de la educación, como es la imaginación, la improvisación, los intereses reales de los/las estudiantes, los sentimientos, el acompañar (y no moldear) a las personas en el proceso de crecimiento. Una ley que crea espacios aún más autoritarios y disciplinados.
En fin, mis ideas basadas en la pedagogía libre es evidente que están muy lejos de cualquier reforma educativa. Pero siento que nos estamos alejando, que estamos destruyendo y que estamos negando la posibilidad de crear espacios libres de ideologías en donde los niños y niñas disfruten compartiendo su vida con los demás. Me da miedo que estemos en un punto de no retorno. Me gustaría mandar muchos ánimos y abrazos a todos aquellos y aquellas que siguen trabajando en proyectos de educación libre, a todos los que intentamos cambiar el mundo a través de la educación y sobre todo, a todos y todas las que promocionan el pensamiento crítico.

dimecres, 17 de juliol del 2013

Apologia a 1984



Ahir vaig veure una notícia on explicaven que algunes de les botigues més famoses i internacionals del mercat han instal·lat un programa que a través de les càmeres i dels telèfons mòbils dels clients (internet), elaboren tot el circuit per on ha passat el client a dins del comerç. Ho justificaven, argumentant que així determinen quines són les preferències dels clients, per millorar la seva eficàcia com a comerciants.
A mi m’ha fet reflexionar sobre la situació de l'home en la moderna societat industrial i la paradoxal noció de llibertat/esclavitud que es produeix en alliberar-se dels vincles de la societat tradicional, caient pres dels nous paranys del consum i de l'estandardització cultural. Ens ofereixen quantitat de productes, assegurant la nostra felicitat a l’adquirir-los, i a més ens controlen i ens vigilen quan caiem en el parany consumista de comprar perquè si. Tot això per perfeccionar la maquina capitalista, i sent una mica Georgelià, de ben segur que en un futur no molt llunyà desenvoluparan productes secrets que ens faran entrar a les botigues i comprar el què més els convingui. Tot aquest entramat comercial és la punta de l’iceberg, és el que es pot observar i publicar en una noticia. Així perd tot valor, simplement ens distreu i ens indigna, a la vegada que publiquem al facebook el nostre malestar. Tot el sistema de control i manipulació informativa és mou en esferes que fins el moment ningú era capaç d’arribar-hi, o d’extreure informació. Sort en tenim de gent com Edward Snowden o Julian Assange, que observant la immoralitat de corrupció informativa, de les quals eren partícips o coneixedors, van considerar que ja ni havia prou. Ens han mostrat una part més de l’iceberg, ens han ensenyat una mostra que no podia sortir a les noticies. I com a conseqüència, els hi ha caigut o els hi caurà tot el pes de la maquinaria capitalista. Han estat etiquetats i acusats de terroristes, de fer trontollar la seguretat nacional, de treballar per l’enemic. Evidentment que són l’enemic. Han mostrat a tot el món el control exhaustiu i repressiu del qual disposen molts governs de països teòricament desenvolupats. Han mostrat el que no s’havia d’ensenyar. Ens vigilen, ens graven, ens escolten i no ens ho diuen. Ara sembla ser que és per la nostra seguretat. Som al Londres de 1984. George Orwell devia preguntar quins plans tenia el govern dels Estats Units per escriure el seu llibre. Mai s’ha arribat a apropar tant la ficció amb la realitat.  

M’agradaria comentar una reflexió que em va fer la meva parella. Em va comentar que amb les noves tecnologies, els seus caps la tenien controlada tot el dia. Que per mitjà d’internet et poden localitzar, preguntar-te o demanar-te feina en qualsevol moment del dia. Considero que l’alienació al treball que proposava Marx, s’ha complert i perfeccionat de manera inversemblant. Ens ha retallat dràsticament la llibertat individual, quan el missatge social era tot el contrari! Com en tota la publicitat de la societat postmoderna, ens han vengut els nous aparells electrònics com a elements imprescindibles per a la vida moderna. La pròpia pressió social ha desencadenat una necessitat pels programes d’última generació, que sense avisar ens han envaït el nostre territori personal. D’alguna manera ens veiem immersos en tot un procés de control “invisible”, en què a més hi som partícips i només en valorem la comoditat en la qual ens han fet creure. Bé, davant de tot això em quedo amb una frase d’Erich Fromm, en què diu: "El peligro del pasado era que los hombres fueran esclavos. Pero el peligro del futuro es que los hombres se conviertan en robots"

dimarts, 16 de juliol del 2013

A los niños perdidos


Aquest text mostrat aquí és un fragment del text original d'aquest enllaç: http://www.rebelion.org/docs/87438.pdf 

recomano a tothom a llegir-lo i a veure el documental, a los ninos perdidos, http://www.youtube.com/watch?v=p9hMzGJt2iA 


En el gran cuerpo social del Imperio, en el gran cuerpo social del Imperio que tiene la consistencia y la inercia de una medusa varada, en el gran cuerpo social del Imperio que es como una enorme medusa varada con toda su redondez sobre toda la redondez de la Tierra, se han plantado electrodos, centenares, miles de electrodos, un número increíble de electrodos. De tipos tan diversos que incluso ya los hay que ni parecen electrodos. Esta el electrodo Tele, por supuesto, pero también el electrodo Dinero, el electrodo Farmacéutica y el electrodo Jovencita

Por medio de estos miles, estos millones de electrodos, de naturaleza tan diversa que he renunciado a contarlos, se mantiene el encefalograma plano de la metrópolis imperial. Por estos canales, imperceptibles para la mayoría, se emiten sin pausa las informaciones, los cambios de ánimo, los afectos y contra-afectos susceptibles de prolongar el sueño universal. Y notad que paso por alto todos los dispositivos de captura agregados a estos electrodos, sobre todo periodistas, sociólogos, policías, intelectuales, profesores y demás agentes de un incomprensible voluntariado al que se le ha delegado la tarea de orientar la actividad de los electrodos. Es conveniente mantener un cierto nivel de angustia con el fin de preservar la disponibilidad general a la regresión, el gusto por la dependencia. No por casualidad se difunde en el momento oportuno tal o cual sentimiento de terror, de conformismo o de amenaza.
Nadie debe librarse de esta posición infantil de pasividad hastiada o pendenciera, de saciedad entumecida o de reivindicación quejosa que produce el malvado murmullo de la incubadora imperial.
Se dice “el tiempo de los héroes ha pasado”, con la esperanza de enterrar junto a él toda forma de heroísmo. El sueño de la época no es el buen sueño que procura el descanso, sino más bien un sueño angustiado que os deja más exhaustos todavía, deseosos solamente de volver a él para ale jaros un poco más de la irritante realidad. Es la anestesia que requiere una anestesia aún más profunda. Aquellos que por suerte o por desgracia se sustraen al sueño prescrito, nacen a este mundo como niños perdidos.
¿Dónde están las palabras, dónde la casa, dónde mis antepasados, dónde están mis amores, dónde mis amigos? No existen, mi niño. Todo está por construir. Debes construir la lengua que habitarás y debes encontrar los antepasados que te hagan más libre. Debes construir la casa donde ya no vivirás solo. Y debes construir la nueva educación sentimental mediante la que amarás de nuevo. Y todo esto lo edificarás sobre la hostilidad general, porque los que se han despertado son la pesadilla de aquellos que todavía duermen.

La superación viene siempre de otro lugar

Los padres desaparecieron en primer lugar. Se fueron a la fábrica, a la oficina. Luego fueron las madres las que, a su vez, partieron a la fábrica, a la oficina. Y cada vez no eran los padres o las madres los que desaparecían, sino un orden simbólico, un mundo. El mundo de los padres desapareció en primer lugar, luego lo hizo el de las madres, el orden simbólico de la madre, que hasta entonces nada había logrado socavar. Y esta pérdida es tan incalculable y el duelo por ello tan enorme, que nadie consiente hacerlo. El Imperio resume el deseo de que un neo-matriarcado tome mecánicamente el relevo del difunto patriarcado. Y no hay revuelta más absoluta que aquella que desafía esa indulgente dominación, ese poder cordial, esa empresa maternal.